1.26.2013

Destierro: Prólogo

Sólo el tintineo de las cadenas se escuchaba en la sala. Me molestaban en las muñecas. Eché una rápida mirada a las puertas, sopesando la idea de huir, mas bien sabía que no me era posible.

Tras una largo silencio, la Demonio Mayor habló.
- Bienvenido, querido Preahm.

  Amagué una sonrisa felina. - Que me place, soberana Lucifer -. Hice una pequeña pausa. - No pense que fuese a asistir a mi destierro.

  Lucifer disimuló una mueca juguetona con una mirada asqueada. De nuevo silencio.

  Observé con atención a todos los presentes. Descubrí los ojos de Gabriel y unos cuantos ángeles más en un rincón, observándome con esperanza. Qué pena, gran desperdicio. Les dirigí una mirada asesina. No se me ocurría qué iba a hacer Gabriel, pero me constaba que los demás anunciarían mi llegada a Jesucristo, como buenos lame culos suyos que eran.

  Vi como la boca del Demonio Menor se abría, y anticipé el movimiento de las lanzas a mi espalda, aproximándome al agujero. Me asomé, llevado por la curiosidad. Me deslumbró la luz que salía de él.

Sinopsis 1: La vida de unas tías muy raras

Nos presentamos.
  Somos Náyade, Nereida y Ninfa; trillizas. Vivimos con nuestro hermano mayor Silfo, a veces vienen nuestros padres: Jon, programador; y Elena, editora. Tienen mucha imaginación, de ahí nuestros nombres. La casa está repleta de monstruitos y criaturas fantásticas, tantas que la casa parece un castillo. Nosotras tenemos catorce años, pero Silfo ya tiene dieciocho. A nosotras nos parece muy inteligente, pero, cada vez que le decimos, lo desmiente.

A la gente no le gustamos. Por eso, decidimos contar nuestra historia.

1.15.2013

Enero, pleno invierno.

Hoy he descubierto una Diosa nórdica, poco famosa. Voy a dar aquí a conocer su conjuro.

Conjuro para llamar a Holda
        Todo a mi alrededor está helado, soplan los vientos del invierno, llamo a Holda y Perchta, las Reinas de las Nieves.

Diosas de la Caza Salvaje, grandes Damas, por favor, escuchadme llorar, vigiladme y defendedme mientras navegáis por el cielo.

Con los poderes de la tierra, aire, fuego y agua, guardad y proteged vuestros mágicos hijos.